martes, 29 de mayo de 2012


La palabra virus proviene del latín virus, que significa “toxina” o “veneno”.
Según la biología, un virus es un agente infeccioso microscópico que sólo puede multiplicarse dentro de las células de otros organismos.
La definición del diccionario de la Real Academia Española, virus se define como un organismo de estructura muy sencilla, compuesto de proteínas y ácidos nucleídos, y capaz de reproducirse solo en el seno de células vivas específicas, utilizando su metabolismo.
El primer virus conocido fue el tabaco, descubierto por Martinus Beijerinck en1899, hoy en día se han descrito más de 5.000 tipos, y algunos científicos afirman la existencia de millones de ellos.
Se encuentran en casi todos los ecosistemas y son el tipo de entidad biológica más abundante.
No todos los virus provocan enfermedades, ya que mucho se pueden reproducir sin causar ningún daño al organismo infectado. Sin embargo son representantes importantes de evasiones magistrales de la respuesta inmune y por provocar graves inmunodeficiencias como el VIH.
A diferencia de los priones y viroides, los virus se componen de tres partes principales:
-       material genético, que porta la información hereditaria, puede ser ADN o de ARN, no los dos.
-       Capside, que es una cubierta proteica que protege al genoma
-       Envoltura lípida, se puede encontrar en algunos virus y es una bicapa lipídica que los rodea cuando se encuentran fuera de la célula
Los virus presentan una amplia diversidad de formas y tamaños,  desde simples helicoides o icosaedros hasta estructuras más complejas. Son unas 100 veces más pequeños que las bacterias. La mayoría de los virus estudiados tienen un diámetro de entre 10 y 300 nanómetros. 
Clasificación
En 1962, André BlofRobert Horne y Paul Tournier fueron los primeros en desarrollar una forma de clasificación de los virus, basada en el sistema. Este sistema basa la clasificación en filosclases, órdenesfamiliasgéneros y especies. Por lo que fueron agrupados según sus propiedades compartidas  y el tipo de ácido nucleico del que se compone su genoma.
 Posteriormente se formó Comité Internacional de Taxonomía de Virus, que desarrolló el sistema de clasificación actual y escribió pautas que daban más importancia a ciertas propiedades de los virus para mantener la uniformidad familiar. Un sistema universal para clasificar los virus y una taxonomía unificada han sido establecidos desde 1966. El 7 º Informe del ICTV formalizó por primera vez el concepto de especie vírica como el taxón más bajo de una jerarquía ramificada de taxones de virus.
La estructura de esta clasificacion es la siguiente:
Orden (-virales)
Familia (-viridae)
Subfamilia (-virinae)
Género (-virus)
Especie (-virus)
En 2008 se reconocieron cinco órdenes: los caudovirales, los herpesvirales, los mononegavirales, los nidovirales y los picornavirales. El comité no distingue formalmente entre subespeciescepas y aislamientos. En total, hay cinco órdenes, 82 familias, 11 subfamilias, 307 géneros, 2.083 especies y unos 3.000 tipos que aún no han sido clasificados.
Existe otro tipo de clasificación llamada Baltimore, por su creador David Baltimore, biólogo ganador del Premio Nobel. Este sistema es utilizado en conjunto con el ICTV para la clasificación moderna de los virus. Se basa en el mecanismo de producción de ARNm. El genoma de los virus puede ser monocatenario (ss) o bicatenario (ds), de ARN o ADN, y pueden utilizar o no la transcriptasa inversa. Además, los virus ARN monocatenarios pueden ser o positivos (+) o negativos (-). Esta clasificación reparte los virus en siete grupos:

2 PARTE:
El ciclo de multiplicación viral se define como la serie de etapas secuenciales que transcurren desde el contacto inicial de un virus con una célula huésped hasta la liberación a partir de la misma célula infectada, de la progenie de nuevos viriones.

Adhesión

El evento inicial en el ciclo de vida de un virus es la unión del mismo con la célula huésped a través del proceso de adsorción. Esta unión específica se establece entre una molécula presente en la membrana celular (receptor) y una proteína externa del virión. Algunos receptores virales han sido identificados y son en general carbohidratos, lípidos o proteínas de la membrana plasmática.
Así, la susceptibilidad o resistencia de una célula a la infección está determinada por la presencia o ausencia de receptores específicos. La importancia de la carencia de receptores se demuestra indirectamente porque es posible infectar exitosamente células no susceptibles a algunos virus utilizando ácido nucleico desnudo (transfección).
La unión virus-célula ocurre en dos etapas: una primera unión reversible por atracción electrostática, facilitada por la presencia de cationes: la adsorción irreversible se produce cuando se establece la unión polivalente virus-célula, ya que suele haber muchas copias de los receptores en la célula y múltiple sitios de unión en el virión.

Penetración

Una vez establecida la adsorción, los virus pueden entrar en la célula a través de tres mecanismos diferentes: endocitosis mediada por receptor, fusión con la membrana plasmática y traslocación a través de la membrana plasmática.
Se acepta en la actualidad que los virus desnudos pueden entrar en la célula por traslocación o por endocitosis mientras que los virus envueltos penetran por endocitosis o por fusión.
En la endocitosis mediada por receptor el virus utiliza la misma vía de entrada que emplean muchas macromoléculas fisiológicamente importantes como nutrientes hormonas y factores de crecimiento. El virus absorbido a su receptor va quedando encerrado dentro de invaginaciones de la membrana plasmática recubiertas de una proteína llamada clatrina, que forman primero un hueco recubierto y luego una vesícula. De este modo el virión intacto entra en el endosoma. El pH ácido del endosoma (5 a 5,5) produce cambios conformacionales en las proteínas del virión que permiten la fusión de la membrana del endosoma con la membrana externa del virus y expulsan el genoma viral al citoplasma celular para su libre expresión. (Ver virus de la gripe)
El mecanismo de fusión directa de la envoltura viral con la membrana plasmática celular es utilizado por ciertos virus envueltos como herpes y Paramixovirus. Estos virus poseen en su envoltura glicoproteínas con capacidad de fusión independiente del pH, es decir, que a un pH neutro ocurre la fusión a nivel de la membrana celular liberando el genoma al citoplasma. A diferencia de la entrada por endocitosis, en este caso en ningún momento se ven viriones intactos dentro de la célula. Esta capacidad de fusión con membrana plasmática que tienen ciertos virus ha permitido su utilización como agentes fusogénicos para la obtención de híbridos celulares. (Ver virus del VIH)
Por último, algunos virus desnudos como Adenovirus parecen entrar directamente a través de la membrana plasmática mediante un proceso de traslocación.
Desnudamiento/denudación
El desnudamiento ocurre simultáneamente o después de la penetración y comprende la eliminación de todas o parte de las cubiertas proteicas que rodean al ácido nucleico viral, de manera de dejar expuesto dentro de la célula el genoma viral desnudo o asociado a alguna enzima para que pueda expresarse. En algunos casos sólo se remueve parte de la cápside viral y en esas condiciones el genoma expresa sus funciones. Para otros virus complejos, como por ejemplo los Poxvirus, el desnudamiento parece ocurrir en dos etapas: en la primera hay remoción de ciertas cubiertas proteicas por enzimas celulares, parte del genoma es tanscripto en esas condiciones y luego, en una segunda etapa, y a través de una proteína codificada por el virus, se produce el desnudamiento total del genoma.
En general el desnudamiento es un proceso difícil de estudiar y establecer con precisión sus características por la rapidez con que ocurre y la dificultad en separarlo temporalmente de la penetración. Es por ello que se suele denominar internalización del virión al conjunto de ambos eventos, penetración y desnudamiento.

Replicación del ácido nucleico viral

Virus con genoma de ADN:  Los virus llevan a cabo la duplicación de su ADN por medio de mecanismos y herramientas similares a los empleados por la célula para replicar su material genético. La replicación del ADN viral es generalmente semiconservativa, es decir cada cadena del ADN parental se conserva y por apareamiento con las bases complementarias se duplica, produciéndose como resultado final dos moléculas de ADN, cada una de las cuales está formada por una cadena de ADN parental y una cadena sintetizada "de novo".
Virus con genoma de ARN: A diferencia de lo que sucede con el ADN, la replicación del ARN es un fenómeno único de los virus ya que la maquinaria genética de la célula se basa exclusivamente en el uso del ADN como templado (ADN-ADN o ADN-ARN). Por lo tanto, para la duplicación de su genoma, así como acontecía para la síntesis de sus ARNm, los virus ARN deben necesariamente aportar la enzima ARN polimerasa ARN dependiente.
 Ensamblaje Maduración Liberación
En las etapas tardías del ciclo de multiplicación viral las moléculas de ácido nucleico y proteínas virales sintetizadas en la célula infectada deben ensamblarse para formar los nuevos viriones y salir al espacio extracelular para estar en condiciones de infectar nuevas células. Este proceso de maduración y ensamble, también denominado morfogénesis, comprende el armado de la cápside a partir de las unidades estructurales y luego la formación del virión completo. El mecanismo va a diferir en base a dos propiedades del virión: la estructura de la cápside y la presencia o no de envoltura.

3 PARTE: 
Inmunidad innata frente a los virus
Los mecanismos principales de la inmunidad innata frente a los virus son la inhibición de la infección por los IFN de tipo 1 y la eliminación de las células infectadas por los linfocitos NK.
Muchas de las infecciones causadas por virus se asocian a la producción de IFN de tipo 1, por las células infectadas. Las vías bioquímicas que activan la síntesis de IFN incluyen el reconocimiento del ARN y el ADN vírico por receptores de tipo toll endosómicos, y la activación de cinasas citoplásmicas por el ARN vírico. Los sensores citoplasmáticos del virus proporcionan vías de síntesis de IFN independientes de los RTT, estos sensores incluyen ARN helicasas, como RIG-I (gen inducible de retinoides-I) y MDA-5 que reconoce ARN sintetizados en células infectadas por virus.
Las vías iniciadas por RTT y por sensores citoplásmicos convergen en la actividad de proteína cinasas, que a su vez activan factores de transcripción que estimulan la transcripción del gen del IFN. Los IFN de tipo I actúan inhibiendo la replicación vírica en células infectadas y no infectadas induciendo un estado antivírico. Una de las principales moléculas inducidas por los IFN es la PKR, una proteína cinasas que se debe unir al ARNbc para ser activada y, por tanto, sólo es funcional en las células infectadas por virus. La PKR inactiva la síntesis proteínica, haciendo que las células infectadas mueran. Los linfocitos NK destruyen las células infectadas por distintos virus, también reconocen a las células infectadas en las que el virus anula la expresión de CPH de la clase I.
Inmunidad inmunitarias adaptativas frente a los virus
La inmunidad adaptativa frente a las infecciones víricas depende de los anticuerpos, que bloquean la unión del virus a la célula del huésped y su entrada en ella, y de los LTC, que combaten la infección mediante la destrucción de las células infectadas.
Se producen anticuerpos que sólo son eficaces frente a los virus durante la fase extracelular de su ciclo vital. Los anticuerpos antivíricos actúan fundamentalmente como neutralizantes para evitar la fijación del virus y su penetración en las células del huésped, estos anticuerpos neutralizantes se unen a los antígenos de la envoltura o cápside del virus. Además de la neutralización los anticuerpos pueden opsonizar las partículas víricas y favorecer su eliminación por los fagocitos. Los anticuerpos neutralizantes bloquean la infección de las células por virus y su propagación de una célula a otra.
La eliminación de los virus que residen en el interior de las células está mediada por los LTC, que destruyen las células infectadas, la mayoría de los LTC específicos para virus son los linfocitos TCD8+ que reconocen antígenos víricos citosólicos. En algunas infecciones víricas, en especial por virus no citopáticos, los LTC pueden producir lesiones hísticas.


4parte 
Evasión de los mecanismos inmunitarios por parte de los virus
En su evolución, los virus han desarrollado numerosos mecanismos para evitar una reacción inmunitaria por parte del huésped. Los virus son capaces de modificar sus antígenos y dejan de ser un objetivo de las respuestas inmunitarias del cuerpo humano, estos antígenos afectados son generalmente glucoproteinas de superficie que son reconocidas por los anticuerpos. Los principales mecanismos de variación antigénica son mutaciones puntuales y reorganización del genoma del ARN, gracias a esto, un virus puede hacerse resistente a la inmunidad. En ocasiones, hay tantos serotipos de un virus que la vacunación es ineficiente de forma preventiva, pero pueden producirse vacunas con las proteínas víricas invariables.
Algunos virus inhiben la presentación de antígenos al CPH de clase I, dicha inhibición bloquea la organización y la expresión de moléculas del CPH y la presentación de los péptidos víricos, en consecuencia los LTC CD8 no pueden actuar. Los linfocitos NK son una adaptación para la eliminación de células infectadas con este tipo de virus. Así también hay virus que sintetizan moléculas que inhiben la inmunidad innata y adaptativa, estos virus sintetizan moléculas que se pueden unir a citocinas, o bien ser moléculas homologas a otras de la inmunidad y funcionar como antagonistas de los moléculas propias. Se plantea la posibilidad de que los virus se prepararon y se adaptaron para la colonización al hombre.
Algunas infecciones víricas crónicas se asocian al fallo de las respuestas de los LTC, permitiendo la persistencia de los virus en el cuerpo, por la acción de los linfocitos T inhibidores por la vía PD-1 que ayuda a mantener la tolerancia a los antígenos propios. Los virus aprendieron a aprovechar mecanismos de regulación inmunitaria. También hay virus que pueden infectar y eliminar o inactivar las células inmunocompetentes como el VIH.

5 parte

Los virus son importantes en la biología molecular y celular, ya que proveen de sistemas manipulables para la investigación de las funciones celulares. El estudio y uso de virus ha tenido utilidad en campos como la genética molecular, el procesamiento del DNA y RNA, en inmunología, etc.
Los genetistas utilizan virus como vectores para la introducción de genes dentro de células de estudio. Lo anterior es útil para estudiar el efecto genómico, o para hacer que una célula produzca una sustancia rara. Así también, en la viroterapia, se utiliza a los virus como vectores para el tratamiento de diversas enfermedades, ya que se pueden programar para que actúen sobre células diana específicas; actualmente muestra potencial en el tratamiento cáncer y en la terapia génica. La expresión de proteínas heterólogas por parte de los virus es la base para diversos procesos de manufacturación que actualmente se han ido usando para la producción de varias proteínas como antígenos y anticuerpos de vacunas.
Virus oncolíticos
Es un virus que infecta y lisa de manera preferente a las células cancerígenas; pueden actuar tanto directamente destruyendo dichas células, así como vectores para introducir/inducir la expresión de genes que codifican proteínas anticancerígenas.
La mayoría de estos virus son fabricados para su selectividad tumoral, pero algunos son de origen natural, como el Senecavirus.
Virosoma
Son mecanismos de entrega de fármacos, que consisten de una vesícula de membrana monolaminar fosfolipídica (ya sea mono- o bi-capa), que incorpora proteínas víricas que permiten la fusión de los virosomas con las células diana. Estos pseudovirus no son capaces de replicar, pero son vesículas activas de fusión puras.
En contraste con los liposomas, los virosomas contienen ciertas glicoproteínas envolventes virales, hemaglutinina (HA) y neuraminidasa (NA), intercaladas en la bicapa fosfolipídica. Su diámetro promedio circula alrededor de los 150 nm. Los virosomas son escencialmente influenza-virus sin nucleocápside ni material genético viral.
Fago-terapia
Consiste en el uso terapéutico de bacteriófagos para tratar enfermedades bacterianas. Se desarrolló principalmente en la Unión Soviética alrededor de 1920, pero actualmente no se encuentra aprobado como tratamiento en ningún país aparte de Georgia. La fago terapia muestra muchas aplicaciones potenciales en medicina, odontología, veterinaria y agricultura.
Los bacteriófagos son mucho más específicos que los antibióticos, así que en teoría pudieran configurarse para no atacar tanto a las células del organismo huésped como a aquellas bacterias benéficas, como sería la flora bacteriana intestinal, lo cual reduciría la incidencia de infecciones oportunistas. Tendría un alto índice terapéutico, ya que se esperarían pocos o nulos efectos adversos, y tampoco generaría estrés sobre el hígado. Como los fagos se replican in vivo, una dosis efectiva tendría a ser pequeña. Sin embargo, dicha especificidad también supondría una desventaja: un fago sólo mataría bacterias de cepas específicas. Consecuentemente, mezclas de fagos se tendrían que aplicar para aumentar las posibilidades de éxito, o pudiese en su defecto tomar y aislar la bacteria objetivo para posteriormente encontrar/diseñar su bacteriófago específico.
Actualmente se utilizan en infecciones bacterianas que no responden a los antibióticos convencionales. Son más efectivos que los antibióticos en aquellas bacterias que poseen un biofilm cubierto de una capa de polisacárido, la cual los antibióticos difícilmente atraviesan. En occidente no se ha aprobado su uso en humanos, pero sí se utilizan algunos agentes contra Listeria para eliminar dichas bacterias que contaminan alimentos.








0 comentarios:

Publicar un comentario

 
Design by Free WordPress Themes | Bloggerized by Lasantha - Premium Blogger Themes | Macys Printable Coupons